La disfagia es un trastorno de la deglución que puede afectar a personas de todas las edades. Esta condición puede dificultar la ingesta de alimentos y líquidos, lo cual puede tener un impacto significativo en la calidad de vida. En este blog, exploraremos qué es la disfagia, sus posibles causas y algunos ejemplos de cómo esta condición puede afectar las situaciones cotidianas.
Abordando la disfagia
La disfagia es una alteración de la deglución que puede ocurrir en cualquier parte del proceso de tragar, desde la boca hasta el esófago. Puede ser el resultado de diversos problemas médicos, como accidentes cerebrovasculares, enfermedades neuromusculares, cáncer o enfermedades crónicas, entre otros. Sus síntomas pueden incluir dificultad para tragar, sensación de obstrucción en la garganta, dolor o malestar al tragar y tos o asfixia durante las comidas.
La disfagia puede ser causada por una variedad de factores que afectan los mecanismos involucrados en el proceso de deglución. Estos mecanismos incluyen la preparación oral, el transporte del alimento a través del esófago y el cierre adecuado de las vías respiratorias durante la deglución. A continuación, se detallan algunos de los mecanismos causantes de la disfagia.
Posibles causas de la disfagia:
Problemas estructurales o anatómicos: Los trastornos en las estructuras responsables de la deglución, como la boca, la garganta o el esófago, pueden causar disfagia. Asociados a estos trastornos también se incluyen tumores, estrechamiento del esófago (estenosis esofágica), malformaciones congénitas o anillos vasculares que comprimen el esófago.
Trastornos neuromusculares: Las afecciones que afectan a los músculos y los nervios involucrados en la deglución pueden provocar disfagia. Por ejemplo, el accidente cerebrovascular, la esclerosis múltiple, la enfermedad de Parkinson, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y la distrofia muscular son algunas condiciones que pueden debilitar los músculos o interferir con las señales nerviosas necesarias para una deglución adecuada.
Efectos secundarios de la radioterapia o cirugía: En algunos casos, la radioterapia o la cirugía en el área de la cabeza o el cuello pueden dañar los músculos y los tejidos implicados en la deglución, lo que puede tener como resultante esta patología.
Afecciones inflamatorias o autoinmunes: Enfermedades como la esofagitis eosinofílica, la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) o la enfermedad celíaca pueden causar inflamación en el esófago y dificultar el paso de los alimentos.
Medicamentos y efectos secundarios: Algunos medicamentos, como los analgésicos, los antidepresivos o los medicamentos para la presión arterial alta, pueden causar sequedad en la boca o debilidad muscular, lo que puede contribuir a la disfagia.
Envejecimiento: A medida que envejecemos, los músculos involucrados en la deglución pueden debilitarse, lo que puede llevar a problemas de deglución.
Es importante tener en cuenta que estas son solo algunas de las causas comunes de la disfagia y que cada caso puede ser único. Si alguien experimenta dificultades para tragar, es fundamental buscar la evaluación y el diagnóstico de un profesional de la salud, como un médico del habla y lenguaje, para determinar la causa subyacente y recibir el tratamiento adecuado.
Situaciones del día a día de una persona con disfagia
Para entender la realidad de los pacientes, a continuación, te damos situaciones difíciles a las que se enfrenta diariamente una persona con disfagia.
En un restaurante: Una persona con disfagia puede enfrentar desafíos al comer fuera de casa. Pueden necesitar modificar la textura de los alimentos o elegir opciones más suaves y fáciles de tragar, como sopas o purés. También podrían requerir más tiempo para comer y posiblemente necesitar asistencia adicional, como triturar los alimentos antes de ingerirlos.
Durante reuniones sociales: Las personas con disfagia pueden sentirse incómodas o avergonzadas al comer o beber en eventos sociales. Pueden optar por evitar ciertos alimentos o bebidas. La falta de comprensión de los demás sobre su condición puede agravar la situación, lo que resalta la importancia de la sensibilización y educación sobre la disfagia.
En el entorno laboral: Las personas con disfagia pueden enfrentar dificultades para mantenerse hidratadas o nutridas durante el trabajo. Pueden necesitar ajustar su horario de comidas y tener acceso a alimentos y líquidos adecuados. Además, podrían requerir adaptaciones en el lugar de trabajo, como descansos adicionales o cambios en la ubicación para comer en un entorno más tranquilo.
En el hogar: La disfagia también puede afectar las actividades cotidianas en el hogar. Preparar comidas puede requerir más tiempo y esfuerzo para asegurarse de que los alimentos estén adecuadamente texturizados. Además, los utensilios de cocina especializados y los espesantes pueden ser necesarios para garantizar una ingesta segura y placentera.
Ayudas para superar la disfagia
Afortunadamente, existen varias estrategias y apoyos que pueden ayudar a las personas con disfagia a superar los desafíos diarios. Estas pueden incluir:
Consultar a un médico del habla y lenguaje para recibir un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.
Modificar la textura de los alimentos para que sean más fáciles de tragar, como triturar, licuar o espesar los alimentos según las indicaciones del profesional de la salud.
Realizar ejercicios específicos para fortalecer los músculos utilizados en la deglución.
Utilizar dispositivos de asistencia, como pajitas especiales o tazas con válvulas anti-derrame.
Buscar el apoyo de grupos de pacientes o comunidades en línea donde se comparten experiencias y consejos útiles.
En conclusión, la disfagia puede presentar desafíos en la vida diaria, pero con el apoyo adecuado y la implementación de estrategias específicas, las personas afectadas pueden superarlos y llevar una vida plena y satisfactoria. Si te interesa profundizar más en este tema puedes echarle un vistazo al perfil de Nuria Jorda en TikTok. Es fundamental que se promueva la concienciación y comprensión de esta condición para garantizar un entorno inclusivo y apoyar a quienes la padecen. Juntos, podemos ayudar a las personas con disfagia a superar los obstáculos y vivir su vida al máximo. ¡No te pierdas ninguna entrada de nuestro blog!